domingo, 28 de septiembre de 2014

GASTRONOMIA LLANERA PARTE 2

MAJULE:  

Es una bebida hecha con plátano maduro cocido y diluido en agua, que puede convertirse en chicha brava si se deja fermentar por varios días.   Entre la comunidad Indígena Chiricoa, de Arauca el abuso de la bebía ha llevado a la extinción de la población.  Ellos dicen que cuando toman tanto majule se vuelven malos y se matan unos a otros y que el desenfreno por la bebida trajo las iras del dios trueno, que derribo los arboles grandes paraqué no fueran orgullosos y produjo una gran inundación  que ahogo a los Chiricoas que se embriagan con el majule.

PERICADA CON PAN DE ARROZ Y GUARULO

El pan de Arroz combina los granos remojados del cereal con la cuajada fresca obtenida en los ordeños.  Esta masa de arroz y queso se somete a cocción en horno hasta obtener un pan de consistencia blanca o tostada.   La pericada y el pan de arroz  como platos matutinos, encuentran acompañante perfecto en el guarulo, un café claro endulzado con panela.   La pericada de Huevos en Arauca es común con huevos de gaviota, garzas  o de tortuga, o en su defecto de gallina.

 PAN DE ARROZ

 
INGREDIENTES
1 libra de arroz
1 libra de cuajada
¼ de mantequilla
1 taza de leche
Sal al gusto

Pan de Arroz
PREPARACIÓN

Lavar el arroz, dejar remojar en agua por 3 horas y molerlo húmedo junto con la cuajada, hasta obtener una harina fina.
La harina resultante se remoja con leche, mantequilla o aceite vegetal, hasta que la masa quede manejable.
Se elaboran con la masa, palitos alargados, se doblan uniendo sus puntas hasta quedar en forma de corona o rosquita y se ponen en una lata para hornear.
Se hornean por 20 minutos a 250° C.



PICILLO: 



 El picillo es una preparación común que se elabora principalmente con carne seca de res picada en tiras delgadas.  Esta se cocina hasta que ablanda y se le agrega cebolla cabezona y larga, ajo y pimentón y se acompaña con yuca cocida.  El picillo también puede hacerse con pescado y carnes de monte.  Así lo dice la copla popular:  Esta noche cenare con picillo de venao.

CALDO:   



En los desayunos y en los parrandos llaneros nunca pueden faltar los caldos, que proporcionan energía e hidratan el organismo.   En las mesas cotidianas es usual el caldo de cabeza de cachama, el pez amazónico de más amplio consumo en la región llanera.  Igualmente se preparan caldos de costilla de res, o changua cerrero que consiste en agua con sal y cilantro picado.


MEDIAS NUEVES O MEDIAS TARDES:


Nadie puede soportar la fatiga del trabajo en la región si no nutre su organismo entre comidas, pequeños bocados de masas de yuca, arepitas calientes o tragos ocasionales de chicha suave, son un comportamiento fundamental de la dieta.



GOFIOS:  



Son una antigua tradición en la vertiente indígena llanera, son amasijos de maíz tostado y molido que acompaña al llanero en las largas jornadas en la llanura.  Las harinas de maíz o de yuca hidratadas con agua y saborizadas con miel o ají, constituían el alimento básico de la dieta alimentaria de las comunidades indígenas de la selva.  Los Gofios se tornan criollos con la panela traída por los españoles.   Como preparación básica permite distintas variantes y también puede hacerse con maíz cocido, maíz en chócolo, maíz amarillo o maíz blanco entre otros.




TUNGOS LLANEROS


 Los tungos pertenecen a la gran tradición colombiana de la cocina de los envueltos en hojas, cuyo plato más representativo es el tamal.   Estos son una masa dulce de arroz con queso envuelta en diferentes hojas.   En los llanos resulta típico el uso de la legue vaca es una planta común del amazonia y de la cuenca del rio magdalena.   Por su tamaño y resistencia ha sido habitual en la cocina así como el bijao, las hojas de plátano y otras.   Los investigadores han llegado a contabilizar más de un centenar de hojas distintas utilizadas en Colombia para envolver alimentos en los procesos de cocción. 


CAFÉ LLANERO


INGREDIENTES
1 libra de café en pepa
1 panela
6 clavitos dulces
Astillas de canela al gusto

Café
PREPARACIÓN
Se tuesta el café en una paila grande, revolviendo con una paleta de madera hasta que dore. La prueba para saber si el café está bien tostado, es morder un grano y si éste se parte sin mucha presión está en su punto.
Una vez esté tostado se le agrega la panela derretida, esto despedirá mucho humo, momento que se aprovecha para echar los clavitos y la canela.
Se toma el grano de café amelcochado, se frota entre las manos hasta que quede bien recubierto y se retira inmediatamente del fuego.
Dejar enfriar un poco y moler finamente. El café molido resultante se envasa en un frasco para conservar su aroma.
La bebida se prepara agregando café molido al agua hirviendo y pasando el contenido por un filtro de tela.


GASTRONOMIA LLANERA INTRODUCCION



La gastronomía a través de la historia se ha ligado a la cultura y al diario vivir como lo podemos ver en el siguiente texto de 1759:
“Cada cien reses dicen los prácticos necesitan cuatro peones a caballo, y uno que llaman puntero en cada saca, un arriero y dos bestias de carga para carne y pan, se necesita un mayordomo o soldado que gobierne las sacas; se necesita un fierro de herrar grande y con poco fuego, para el ganado que se cansase o se quedare, y si han de salir distintas sacas que se hagan tres o cuatro fierros de herrar para que se abaje aprisa… Se les da de comer cazabe y carne y cacao de panela, a tarde y mañana y lo costea el dueño del ganado… El cazabe en Casanare vale a cuatro reales la arroba y fuera de allí a peso en todas partes… El millar de cacao si se compra en los Llanos vale diez o doce reales, y la parda (Panela) lo mismo”.
Texto: Don Francisco Garay, 6 de Junio de 1759 Colección de Documentos Inéditos sobre la geografía y la historia de Colombia.   Recopilación de Antonio B. Cuervo.   Bogotá 1893 Tomo III, PP 332-333
El inmenso territorio de los Llanos y la Región de la Orinoquia es una zona de diversidad biológica y variedad cultural sin igual.   Grandes jinetes y avezados navegantes fluviales, los llaneros han construido una cultura singular, a medio pelo entre el caballo y la canoa.  En su cocina se cruzan los frutos de la ganadería con aquellos propios de las chacras y otros que se dan en la profundidad de la selva.

Al comienzo del día en los Llanos y la Orinoquia, donde aún perduran las costumbres del modo de vida rural, es el momento  más importante de la alimentación.   Se acostumbra un café cerrero a las cuatro de la mañana para iniciar las faenas y un desayuno con carnes alrededor de las ocho o nueve.


MAMONA O TERNERA A LA LLANERA




La carne de mamona pertenece a la categoría de carnes blancas ya que designa las crías jóvenes, tanto machos como hembras, que no han pastado y se han alimentado exclusivamente de leche. La carne de ternera entre los tres y seis meses se considera de calidad extra, de 6 meses en adelante adquiere un matiz rosado.
El peso recomendado del animal debe ser entre 70 y 120 kilos, equivalentes a 6 y 10 arrobas, para que alcance para unas 70 personas. Varas o chuzos de madera: las más utilizadas para ensartar las presas son arrayán, ajicito, naranjito, guayabo. Estas deben ser peladas momentos antes de ensartar la carne, procurando que sean redondas y delgadas, y deben tener una longitud aproximada de 2.00 mts.
La leña más utilizada para que produzca buena brasa es la madera de peralejo sabanero, ajicito, guayabo o guamo; ésta se debe amontonar para que la hoguera sea alta y produzca un calor uniforme a todas las presas.
Los chuzos de carne se disponen alrededor de la hoguera en forma vertical y la distancia entre presas depende del calor. Para un asado adecuado la cocción debe ser a fuego lento, usualmente durante cuatro horas, dos por cada lado, procurando no voltear con mucha frecuencia.

La auténtica mamona llanera no lleva ningún tipo de condimento, únicamente se acostumbra utilizar suficiente sal.
La carne de mamona pertenece a la categoría de carnes blancas ya que designa las crías jóvenes, tanto machos como hembras, que no han pastado y se han alimentado exclusivamente de leche. La carne de ternera entre los tres y seis meses se considera de calidad extra, de 6 meses en adelante adquiere un matiz rosado.
El peso recomendado del animal debe ser entre 70 y 120 kilos, equivalentes a 6 y 10 arrobas, para que alcance para unas 70 personas. Varas o chuzos de madera: las más utilizadas para ensartar las presas son arrayán, ajicito, naranjito, guayabo. Estas deben ser peladas momentos antes de ensartar la carne, procurando que sean redondas y delgadas, y deben tener una longitud aproximada de 2.00 mts.
La leña más utilizada para que produzca buena brasa es la madera de peralejo sabanero, ajicito, guayabo o guamo; ésta se debe amontonar para que la hoguera sea alta y produzca un calor uniforme a todas las presas.
Los chuzos de carne se disponen alrededor de la hoguera en forma vertical y la distancia entre presas depende del calor. Para un asado adecuado la cocción debe ser a fuego lento, usualmente durante cuatro horas, dos por cada lado, procurando no voltear con mucha frecuencia.
La auténtica mamona llanera no lleva ningún tipo de condimento, únicamente se acostumbra utilizar suficiente sal.


HAYACAS



Es el tamal del llano, hecho con carne de gallina, res, cerdo, masa de maíz, rodajas de huevo, condimentos y envuelto en hojas de plátano en forma rectangular aplanada. Es uno de los platos más apreciados de la región y se sirve en todos los festejos.

INGREDIENTES
4 libras de pollo
4 libras de carne de res
4 libras de cerdo
10 huevos
2 ½ libras de harina de maíz
1 ajo
4 libras de cebolla larga
1 cucharadita de orégano
1 cucharada de comino
1 cucharadita de onoto
Sal al gusto
1 libra de pimentón
Para 40 tamales


PREPARACIÓN

Adobar las carnes con todos los condimentos y dejar en reposo dos horas. Ponerlas en un recipiente con suficiente agua procurando cubrir el contenido y dejar cocinar hasta que ablanden las carnes, el pollo debe ser sacado con anterioridad ya que su carne es blanda. Se cortan las carnes en trocitos pequeños y se guarda el caldo sobrante para ser utilizado posteriormente.
Preparar aparte un guiso con cebolla, ajo, cilantro, pimentón, sal al gusto, ají, onoto y orégano, todo finamente picado.
Añadir la mitad del caldo sobrante sobre las carnes picadas con el guiso y agregar harina de maíz revolviendo sobre el fuego hasta obtener una masa homogénea.
Con el caldo sobrante disolver otro poco de harina revolviéndola hasta que quede suave, para esparcirla con una cuchara sobre las hojas de plátano.
Una vez esparcida la masa en la hoja, se ponen de 3 a 4 cucharadas de la mezcla de carnes, 2 rodajas de huevo duro y por último se envuelve en forma rectangular haciendo el amarre con cabuya.
Cocinar en una olla grande procurando que su fondo lleve base de palos o de hojas, cubrir con agua hasta la mitad del contenido y dejar hervir por dos horas.




BIBLIOGRAFIA - Y AGRADECIMIENTOS
- CASA EDITORIAL EL TIEMPO - ASI SABE COLOMBIA, TOMO 7 - LLANOS ORIENTALES, LA AMAZONIA Y LA ORINOQUIA. Textos: German Patiño Ossa, Recetas: Juanita Umaña de Vargas. 2009

- EDITORIAL ZAMORA, EL CHEF EN CASA - COCINA COLOMBIANA INTERNACIONAL.- CATALOGOS DE COCINA REGIONAL
http://www.mueveteporcolombia.com/

http://www.notasdelllano.com/gastronomia.html